Dentro de la administración pública, la gestión pública es la disciplina que se encarga de la administración de los recursos de una nación, de forma eficiente, a través de sus entidades públicas. Su importancia radica, justamente, en que de la eficiencia en la gestión depende el desarrollo del país, la relación entre los ciudadanos y el Gobierno Nacional, así como entre este último y el sector privado.
Una gestión pública transparente, medible y proyectada hacia el futuro, a través de objetivos concretos e indicadores de gestión claramente definidos, protege los recursos públicos, garantiza la eficiencia en la gestión de estos y permite ofrecer servicios públicos que respondan a las necesidades y las problemáticas de los ciudadanos.
En este artículo abordaremos su definición detallada, entenderemos su evolución hacia la Nueva Gestión Pública, las diferencias entre esta y su concepción previa, su aplicación efectiva y las herramientas que facilitan y optimizan esta aplicación.
En Pensemos somos expertos en la implementación de modelos de gestión en el sector público y conocemos en profundidad los retos particulares de las organizaciones públicas y su gestión.
¿Qué es la Gestión Pública?
La gestión pública es la rama de la administración pública encargada de la gestión de los recursos del Estado con el propósito de cumplir con sus fines misionales. Se encarga de dar las directrices a las instituciones públicas, a través de modelos de gestión y la administración de los recursos, para la consecución de sus objetivos a corto y largo plazo.
El Departamento Nacional de Planeación, quien es uno de los entes encargados de la gestión pública en Colombia, ofrece la siguiente definición:
“La gestión pública podrá medirse por resultados, tendrá un accionar transparente y rendirá cuentas a la sociedad civil. El mejoramiento continuo de la Administración Pública se basará en el fortalecimiento de herramientas de gestión consolidadas en un sistema integrado que permita el buen uso de los recursos y la capacidad del Estado para producir resultados en pro de los intereses ciudadanos. Estas deberán desarrollarse bajo un marco de modernización, reforma y coordinación interinstitucional.”
Esta definición nos da una idea clara de los puntos esenciales que caracterizan la gestión pública. Resumiendo, la gestión pública:
- Es medible
- Debe actuar con transparencia
- Rinde cuentas a la sociedad civil
- Debe propender por el mejoramiento continuo
- Debe contar con un sistema que integre las herramientas de gestión, que propenda por el buen uso de los recursos y que capacite a los funcionarios y servidores de las instituciones del Estado para obtener resultados.
¿Cuáles son las funciones de la Gestión Pública?
Algunas de las funciones de la Gestión Pública son:
- La implementación de políticas públicas y, en ocasiones, su ideación. Evaluar estas políticas públicas de forma conjunta con la administración, el sector privado y las organizaciones ciudadanas.
- Es responsable de la identificación de problemas o necesidades de la ciudadanía que deben ser cubiertas.
- Persigue la eficiencia y la equidad en la ejecución de los recursos. Busca repartirlos de forma equitativa y a partir de criterios que respondan a sus objetivos misionales.
- Tiene objetivos que persiguen el bienestar de la nación y buscan satisfacer las necesidades de la ciudadanía para garantizar condiciones de vida digna.
¿Qué es Gestión Pública efectiva? Ejemplos
La efectividad y la eficiencia son dos indicadores fundamentales de la gestión en general, aunque se comporten de forma muy distinta en la gestión privada y en la pública. Su definición, sin embargo, se mantiene en ambos ámbitos, aunque al interpretarse en cada sector adquiere características particulares.
La eficiencia se mide, por lo general, a partir de los rendimientos. En el sector privado es clarísimo que un gerente debe administrar la organización de manera rentable. Aunque puedan existir diferentes expectativas sobre una gerencia y cada gerente las pueda manejar a su manera, no podrán existir ambigüedades sobre la rentabilidad.
La efectividad de una organización depende, según Chester I. Barnard, presidente de la New Jersey Bell Telephone Co, de hasta qué punto logra alcanzar sus propósitos.
Por supuesto, los propósitos de una organización pública tienen diferencias radicales con aquellos de las organizaciones privadas y, en ese sentido, la eficiencia de la Gestión Pública tiene un punto de medida que no está tan estrechamente relacionado con la rentabilidad o los rendimientos como lo está en el sector privado.
El sector público enfrenta retos distintos a los del sector privado, reconocer estas diferencias es fundamental para alcanzar la eficiencia. Algunas de estas diferencias son:
- Deben aceptarse objetivos que son establecidos por organizaciones externas
- Deben operar bajo estructuras que han sido creadas por grupos externos
- Deben trabajar con personas cuyas carreras están muchas veces fuera del control del gerente
- Deben alcanzar sus objetivos en menos tiempo debido a los cambios de gobierno
¿Qué es la Nueva Gestión Pública y cuál es su objetivo?
A finales del siglo XX, sectores de la vida política y económica de países de Europa occidental y Estados Unidos señalaron la necesidad de repensar radicalmente el modo en que se concebía en Latinoamérica, sobre todo, al Gobierno y al Estado. Propusieron su desburocratización y la revisión del funcionamiento de todo lo público y lo subvencionado, y fundaron, en la década de 1990, lo que se llamó la Nueva Gestión Pública (NGP).
La Nueva Gestión Pública, que también es nombrada por algunos autores como modelo antiburocrático, es un concepto que surgió a partir del cuestionamiento de las jerarquías piramidales al interior de las instituciones públicas, pues identifica que este tipo de estructuras entorpecen la toma de decisiones en lugar de aportar valor.
La propuesta de este modelo consiste en crear estructuras de trabajo con una interacción mucho más horizontal, que faciliten la descentralización y agilicen la toma de decisiones para que así también se puedan tomar acciones de forma mucho más eficaz.
La Nueva Gestión Pública propende por la simplificación de los procesos en pro de la obtención de resultados. Deja de hacer de los procedimientos su mayor prioridad y se enfoca en hacerlos flexibles para que puedan adaptarse más fácilmente a los cambios de escenario y a las transformaciones tanto internas como externas.
Software de Gestión Pública ¿Cómo funciona y qué beneficios ofrece?
Dado todo lo que hemos presentado hasta este punto, es evidente que la gestión pública se enfrenta a retos y volúmenes que la gestión privada desconoce por tener unas características y unos lineamientos que no siempre coinciden. Por ello, muchas veces, al intentar extrapolar las herramientas del sector privado al público, estas se quedan cortas y no logran dar respuesta a todas las exigencias del sector.
Un Software de Gestión Pública, es una herramienta ideada y construida para responder a estas particularidades del sector: permite visualizar todos los elementos que constituyen una organización pública y hacer un seguimiento riguroso del avance y el cumplimiento de las políticas gubernamentales.
Además, facilita la implementación de normativas y parámetros, el seguimiento y la evaluación de las mismas. Esto significa que los procesos de auditoría y rendición de cuentas a la población civil dejan de ser procesos incomunicables y arduos en exceso, para convertirse en informes sencillos que pueden obtenerse y visualizarse de manera clara a través del software.
Su configuración a la medida permite, además, la implementación de un modelo de Nueva Gestión Pública, pues es flexible y se puede ajustar a las posibles transformaciones que demande el contexto en el cual se desarrolla.
En Pensemos tenemos años de experiencia ideando y ajustando nuestro Software de Gestión Pública a las particularidades de nuestros clientes del sector. Conocemos la importancia de contar con una herramienta de gestión, que propenda por el buen uso de los recursos y que capacite al Estado para obtener resultados. Contáctenos y conozca cómo esta herramienta puede gestar el cambio que la organización pública de la que hace parte requiere.
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