Si nos hacemos la pregunta ¿Qué es realmente la estrategia? Navegamos rápidamente por Internet y encontraremos muchas definiciones diferentes: es un plan de alto nivel para lograr uno o más objetivos en condiciones de incertidumbre. Un plan de acción diseñado para lograr un objetivo a largo plazo o general. Un método o plan elegido para lograr el futuro deseado, como una meta o la solución a un problema. Nosotros hemos dado nuestra definición de estrategia y hoy queremos compartirles cuáles son sus principales características. ¡Acompáñenos!
La estrategia es diferenciación
Para buscar nuevas fuentes de ventaja y hacerlas competitivas y sostenibles a largo plazo, la empresa también debe inventar nuevas reglas y nuevos juegos para ser únicos y crear riqueza. Simplemente, copiar al líder, significa que se destruye el valor para todas las empresas. Por lo tanto, para parecer diferente, la diferenciación de la estrategia es imprescindible.
La estrategia es colectiva
La visión, misión, objetivos y estrategias corporativas están determinadas por la alta dirección, su construcción es colectiva. Las estrategias de la Unidad de Negocio son decididas por los jefes de las unidades de negocio y los planes funcionales por los jefes funcionales. Pero el consentimiento de la alta dirección es imprescindible. Es la alta gerencia la que resuelve las paradojas entre los objetivos en conflicto, las funciones existentes, las actividades futuras, y la asignación de recursos. Finalmente, permea a todos los colaboradores, que desde cada una de sus labores se alinean con la estrategia.
La estrategia es multidisciplinaria
Crear la estrategia corporativa implica estudiar oportunidades estratégicas en las áreas de marketing, finanzas, servicio al cliente, recursos humanos y operaciones, que tengan una visión holística, es decir, integral, de la organización. Y por supuesto, la estrategia impacta todas las áreas.
La estrategia es entendible
La estrategia debe ser clara, comprensible e inteligible. Los empleados deben entender exactamente cuál es la estrategia de su organización para lograrla con éxito. Una estrategia requiere una comunicación continua, en un lenguaje sencillo, para que todos los colaboradores puedan participar y contribuir con ella.
La estrategia es multidimensional
La estrategia implica múltiples aspectos, como la cultura organizacional, los valores, la misión, la visión, los recursos, las competencias, las habilidades y la historia corporativa, entre otros.
Ser multidimensional implica, estudiar el contexto externo y responder dos preguntas ¿Cómo impactar? Y ¿Cómo me impactan las circunstancias externas?
La estrategia es jerárquica
La estrategia empresarial es decidida por la Alta Dirección, que se asesora de sus líderes o consultores externos para la formulación. Para ello puede leer nuestro artículo ¿Cómo lograr consenso en las conversaciones difíciles?
La estrategia es dinámica
No está sujeta a un plazo de tiempo, pues la estrategia puede ser modificada por la organización cuando el entorno cambie, lo cual cual es muy probable por el dinamismo del contexto de los mercados. En ese sentido, es importante someterla a una retroalimentación constante para ajustar los cambios que son necesarios.
La estrategia es competitividad
El objetivo de la estrategia es crear competitividad (que las empresas funcionen mejor que los competidores), sinergia (entre las diferentes partes de la organización y sus actividades) y la creación de valor para alcanzar la visión y la misión.
Una organización puede alcanzar su destino (visión) solo si puede crear valor para la empresa y sus partes interesadas (misión). La creación de valor implica la adición de valor económico (ganancias para la empresa), la adición de valor al cliente (el valor que los clientes perciben en relación con los competidores), la adición de valor a las personas (valor obtenido al permitir que los empleados sean el recurso más productivo) para satisfacer las necesidades de todas las partes interesadas.
La estrategia es proactividad
No depende de agentes externos o fuerzas que la empresa no puede controlar. La estrategia se desarrolla con los recursos humanos, físicos, económicos de la empresa y requiere el esfuerzo necesario para sobreponerse a la competencia.
Lo que no es la estrategia
Con base en las anteriores características y para evitar confusiones hemos preparado una lista de lo que “no” es la estrategia:
- No es una respuesta a las fluctuaciones a corto plazo en las operaciones o el medio ambiente, ni es la respuesta a los informes frecuentes a corto plazo sobre, por ejemplo, las ventas, la rotación laboral, la producción semanal o los precios de los competidores que recibe cada gerente.
- No es un conjunto de números simplemente proyectados de tres a cinco años, ni un ejercicio de extrapolación basado en el balance general de este año y el estado de pérdidas y ganancias.
- No es una racionalización de lo que se hizo el año pasado o de lo que aparece en el presupuesto del próximo año. Una estrategia real, es en contraste, un plan a largo plazo que establece la dirección y el tono del plan a corto plazo.
- No es una declaración de intenciones o deseos optimistas.
- No es un conjunto de ideas en la mente de unos pocos líderes selectos de la empresa: las ideas se denominan estrategia si se expresan cuando provienen de personas clave.
En Pensemos, con este artículo, quisimos mostrar los elementos que caracterizan la estrategia, para afianzar la definición y aclarar cada vez más el concepto. Nuestro software BSC Suite Visión Empresarial es una herramienta útil que le permitirá hacer un seguimiento riguroso de su estrategia, ayudándole a obtener mejores resultados. No dude en contactarnos, si desea más información sobre la Planeación Estratégica o si desea conocer más sobre nuestro software de gestión estratégica.
