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Hace algunos meses, tuve la oportunidad de desarrollar un Webinar sobre las claves más importantes para construir indicadores exitosos en las organizaciones. Luego compartimos dicha experiencia con líderes de seguimiento, estrategia y proyectos de más de 30 organizaciones del ámbito público y privado y durante el ejercicio logramos identificar que la mayoría de ellos tenían dudas sobre si estaban midiendo e implementando de forma adecuada sus planes estratégicos y a partir de esa experiencia, en Pensemos queremos ofrecer este artículo con el compromiso de seguir compartiendo 25 años de historia, mientras desarrollamos una herramienta que apoya a más de 100 organizaciones en Latinoamérica y España.

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La gestión pública efectiva de un Plan Estratégico es crucial para el bienestar de las organizaciones, incluyendo el gobierno y otras agencias de índole pública, que deben ser eficientes y efectivas para cumplir con su misión y brindar servicios y beneficios a la comunidad.

Un plan estratégico es una herramienta clave para lograr una gestión pública efectiva. Un plan estratégico es un documento que establece la visión, los objetivos y metas a largo plazo, así como un plan de acción detallado para lograr estos objetivos y metas. En este artículo, discutiremos los 5 pasos clave para implementar un plan estratégico efectivo.

Gestión Pública Efectiva: pasos para implementar un plan estratégico

Paso 1: establecer una visión clara y alcanzable

La visión es una declaración concisa que establece la dirección de la organización y proporciona una imagen clara del futuro deseado. Este es el primer peldaño de la escalera que lo lleva a concretar con éxito su plan estratégico. La visión debe ser un enunciado motivador que establezca la dirección de la organización a largo plazo. Debe ser fácil de entender y comunicar, además de inspirar a las personas a trabajar juntas para lograrla. Es importante que la visión sea clara, alcanzable y realista, ya que es fundamental para su éxito a largo plazo. La visión debe ser ambiciosa, pero también debe ser posible de lograr. Si la visión es demasiado ambiciosa o poco realista, puede desalentar a las personas y hacer que se sientan desmotivadas.

La visión debe ser desarrollada con la participación de todas las partes interesadas en la organización, incluidos los empleados, los líderes de la comunidad y otros miembros clave. Esto asegura que la visión refleje las necesidades y expectativas de todas las partes y que todos los miembros de la organización estén comprometidos y alineados con su consecución.

Es importante comunicar claramente la visión a todos los miembros de la organización y asegurarse de que entiendan su importancia. La visión debe ser revisada y actualizada regularmente para asegurarse de que siga siendo relevante y efectiva en un entorno cambiante.

Un consejo práctico que hemos descubierto en quienes logran llevar a buen término la visión es que esta debe ser memorable para que los miembros de la organización puedan recordarla fácilmente y mantenerla en mente al llevar a cabo la toma de decisiones.

Paso 2: definir objetivos y metas

Una vez establecida la visión, el siguiente paso es definir los objetivos y metas. Para este ejercicio personalmente recomiendo el uso de la metodología SMART, que es un acrónimo que significa Específicos, Medibles, Alcanzables, Relevantes y Limitados en el tiempo (Por sus siglas en Inglés).

Los objetivos deben ser específicos y detallados, lo que significa que deben ser claros y fáciles de entender. También deben ser medibles, lo que significa que deben incluir una forma de medir el progreso y el éxito. Los objetivos deben ser alcanzables, lo que significa que deben ser realistas y posibles de lograr. También deben ser relevantes y significativos para la visión establecida. Por último, deben ser limitados en el tiempo, lo que significa que deben tener un plazo específico para su logro. Además, un objetivo medible es cuantificable, lo que significa que se puede medir y evaluar su progreso. Un objetivo alcanzable es realista y puede lograrse con los recursos disponibles. 

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Definir objetivos y metas ayuda a la organización a enfocarse en las áreas más importantes y garantiza que se estén tomando las medidas adecuadas para lograr los objetivos a largo plazo. Establecer objetivos y metas SMART también ayuda a los miembros de la organización a entender lo que se espera de ellos y les proporciona un marco claro para su trabajo diario. Además, son útiles para evaluar el progreso y realizar ajustes en el camino para lograr los objetivos a largo plazo. 

Paso 3: Identificar los recursos necesarios

En este punto nuestra tarea consiste en identificar los recursos necesarios para lograr los objetivos y metas establecidos. Esto incluye identificar el personal, el financiamiento, la tecnología y otros recursos necesarios para implementar el plan estratégico.

En primer lugar, es esencial determinar los recursos humanos necesarios, incluyendo las habilidades y el conocimiento necesarios para cumplir los objetivos del plan. También es importante identificar los recursos financieros necesarios, como el presupuesto disponible para la implementación del plan o el posible patrocinio, apalancamiento o impulso de nuestras iniciativas por diversos interesados.

Además, los recursos tecnológicos necesarios también deben ser identificados. Esto puede incluir la adquisición de nuevas herramientas y software, así como la capacitación de los empleados para utilizarlos de manera efectiva. También es necesario identificar los recursos físicos necesarios, como la infraestructura y las instalaciones necesarias para llevar a cabo el plan.

Finalmente, es importante tener en cuenta los recursos de tiempo necesarios para la implementación del plan, lo cual incluye el tiempo de los empleados, generando un calendario y plazos establecidos para el logro de los objetivos.

Paso 4: Desarrollar un plan de acción detallado

Una vez que se han establecido los objetivos y se han identificado los recursos necesarios, el siguiente paso es desarrollar un plan de acción detallado.

El plan de acción debe incluir un cronograma detallado que establezca los plazos y las fechas límite para cada tarea y actividad. Este cronograma debe ser realista y tener en cuenta los recursos disponibles, como el tiempo y el presupuesto. Es importante que el cronograma sea revisado periódicamente y ajustado según sea necesario para garantizar que se cumplan los plazos.

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Este cronograma debe identificar claramente quién será responsable de cada cosa, lo que garantiza la ejecución exitosa. Es importante involucrar a todas las partes interesadas en el desarrollo del plan de acción. Esto garantiza que se consideren todas las perspectivas y necesidades, y que todas las partes interesadas estén alineadas y comprometidas con el plan.

Es fundamental que se realice un seguimiento constante del progreso del plan de acción, para garantizar que las tareas se están llevando a cabo según lo previsto y se están cumpliendo los plazos. Se pueden establecer reuniones regulares para revisar el progreso del plan y hacer ajustes en función de los resultados.

Paso 5: Monitorear y evaluar el progreso y el éxito

El último paso, dentro de la gestión pública efectiva, consiste en monitorear y evaluar el progreso y el éxito del plan estratégico. Es importante establecer métricas claras para medirlo, lo cual permite a la organización hacer ajustes según sea necesario. El monitoreo y la evaluación deben ser una parte integral del proceso y deben ocurrir de forma regular y sistemática. La evaluación debe incluir una revisión de los objetivos y metas establecidos, así como una revisión del plan de acción y de los recursos asignados, en lo cual suelen ser muy útiles los tableros de control.

Nuestra experiencia nos ha permitido acompañar la RAE – Reuniones de Análisis Estratégico en numerosas organizaciones. Estas suelen ser una forma sencilla de monitorear este progreso y suelen realizarse con periodicidades trimestrales. 

En Pensemos trabajamos de la mano con herramientas de automatización para el seguimiento y ejecución efectiva de su Plan Estratégico, por lo cual lo invitamos a conocer nuestras soluciones, y aquí puede comunicarse con nosotros.

¿Desea obtener más información sobre cómo hacer una implementación adecuada de su Sistema de Plan Estratégico? Recuerde que puede suscribirse a nuestro blog para conocer más de este y otros temas relacionados. En Pensemos contamos con la experiencia necesaria para acompañarlo en el proceso.

¡Hasta la próxima!

 

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Tags: Administración pública, Planeación estratégica, Público

autor

Dairo Rodriguez Maya

Cargo: Gerente de Base Instalada
Ingeniero Industrial - MBA, padre de familia y amante del cine y los buenos libros, desarrolla su pasión por la calidad en todos los ámbitos y disfruta solucionar grandes retos y liderar equipos, logrando escalar de forma efectiva los modelos de estrategia y sistemas de gestión a todos los niveles de la organización para asegurar los objetivos y la satisfacción de todos los grupos de interés.